Homeopatia cuando empieza hacer efecto
Lista de medicamentos homeopáticos
Oscillococcinum /ˌɒsələˈkɒksɪnəm/ (u Oscillo[1][2]) es un preparado homeopático que se comercializa para aliviar los síntomas de la gripe, aunque no aporta ningún beneficio más allá de las pastillas de azúcar. Es un preparado muy popular, sobre todo en Francia y Rusia.
El Oscillococcinum se promociona de acuerdo con el principio homeopático, no probado, de que «lo semejante se cura con lo semejante» y de que una enfermedad puede curarse con pequeñas cantidades de la sustancia que provoca síntomas similares. Boiron es su único fabricante. El Oscillococcinum se utiliza en más de 50 países y se fabrica desde hace más de 65 años.
El Oscillococcinum fue propuesto originalmente por el médico francés Joseph Roy, basándose en su identificación errónea de una supuesta bacteria oscilante que denominó oscillococcus en las víctimas de la epidemia de gripe española de 1917-1918. Roy dijo que había visto la misma bacteria en enfermos de cáncer, y propuso un preparado homeopático (que afirmó haber aislado en un pato) como remedio para la gripe española. Los microbios que Roy dijo haber visto nunca han sido observados de forma independiente por ningún otro investigador. Además, ahora se sabe que la gripe está causada por un virus y no por una bacteria[3].
Peligros de la medicina homeopática
La homeopatía es un sistema pseudocientífico[1][2][3][4] de medicina alternativa. Fue concebido en 1796 por el médico alemán Samuel Hahnemann. Sus practicantes, llamados homeópatas, creen que una sustancia que provoca los síntomas de una enfermedad en personas sanas puede curar síntomas similares en personas enfermas; esta doctrina se denomina similia similibus curentur, o «lo similar se cura con lo similar»[5] Los preparados homeopáticos se denominan remedios y se elaboran mediante dilución homeopática. En este proceso, la sustancia seleccionada se diluye repetidamente hasta que el producto final es químicamente indistinguible del diluyente. A menudo, no cabe esperar que quede ni una sola molécula de la sustancia original en el producto[6]. Entre cada dilución, los homeópatas pueden golpear y/o agitar el producto, alegando que esto hace que el diluyente recuerde la sustancia original tras su eliminación. Los practicantes afirman que tales preparaciones, al ser ingeridas por vía oral, pueden tratar o curar enfermedades[7].
Todos los conocimientos científicos relevantes sobre física, química, bioquímica y biología[8][9][10][11][12][13] adquiridos al menos desde mediados del siglo XIX[14] contradicen la homeopatía. Los remedios homeopáticos son inertes desde el punto de vista bioquímico y no tienen ningún efecto sobre ninguna enfermedad conocida[8][15][16] La teoría de la enfermedad de Hahnemann, centrada en los principios que denominó miasmas, no es coherente con la posterior identificación de los virus y las bacterias como causas de la enfermedad. Se han llevado a cabo ensayos clínicos que, en general, no han demostrado ningún efecto objetivo de los preparados homeopáticos[17][18][19]:206[20] La inverosimilitud fundamental de la homeopatía, así como la falta de eficacia demostrable, ha hecho que se la califique dentro de las comunidades científica y médica de charlatanería y fraude[3][21][22].
¿cuánto tiempo permanecen los medicamentos homeopáticos en el organismo?
Un informe del Comité de Ciencia y Tecnología de la Cámara de los Comunes de 2010 sobre la homeopatía afirmaba que los remedios homeopáticos no funcionan mejor que los placebos, y que los principios en los que se basa la homeopatía son «científicamente inverosímiles». Esta es también la opinión de la Jefa del Servicio Médico, la profesora Dame Sally Davies.
Un principio central del «tratamiento» es que «lo semejante se cura con lo semejante», es decir, que una sustancia que causa ciertos síntomas puede también ayudar a eliminarlos. Un segundo principio central se basa en un proceso de dilución y agitación, llamado sucusión.
Los profesionales creen que cuanto más se diluya una sustancia de este modo, mayor será su poder para tratar los síntomas. Muchos remedios homeopáticos consisten en sustancias que se han diluido muchas veces en agua hasta que no queda nada o casi nada de la sustancia original.
La homeopatía suele practicarse de forma privada y los remedios homeopáticos pueden adquirirse en las farmacias. El precio de una consulta inicial con un homeópata puede variar entre 20 y 80 libras. Los comprimidos homeopáticos u otros productos suelen costar entre 4 y 10 libras.
Médico homeópata
Acaba de tomar su remedio homeopático constitucional o de acción profunda y puede que le cueste recordar qué puede interferir en el proceso, cómo seguir de forma fiable el progreso de su curación y, lo que es más importante, qué ocurre a continuación.
Por lo general, entre 7 y 10 días después de tomar un remedio, la acción de éste se hará evidente y gradualmente con el tiempo y con el tratamiento continuado. Dentro de este marco de tiempo usted puede experimentar un agravamiento o el retorno de los viejos síntomas. Si esto ocurre, suele durar entre 24 y 48 horas, pero puede durar más. Asegúrese de consultar a su homeópata en caso de que esto ocurra para que pueda evaluar adecuadamente lo que está sucediendo y aconsejar los siguientes pasos.
Una agravación es un empeoramiento temporal de los mismos síntomas que usted está tratando de resolver. Ciertamente no es un resultado deseado o pretendido, pero en el caso de que ocurra suele preceder a la resolución duradera de los síntomas. Sin embargo, si el malestar se prolonga, consulte a su homeópata. A pesar del agravamiento de los síntomas, los clientes suelen comentar que se sienten a gusto, tranquilos o bien hasta que los síntomas desaparecen por completo.